Si algo nos ha enseñado Tolkien, es que un anillo puede despertar la codicia de propios y extraños, y atraer todo tipo de desgracias. Sí, sabemos que no es lo mismo un robot aspirador que se ha tragado un anillo que toda una epopeya entre hobbits, elfos, hombres y orcos por ver quién se hace con el anillo de poder del malvado Sauron… ¡Pero mi alma de friki no ha podido resistirse a hacer esa referencia!
Bromas aparte, el hecho de que nuestro robot aspirador haya aspirado por accidente un objeto de valor como un anillo requiere que tomemos ciertas medidas para poder recuperarlo, pero también para evitar que el robot aspirador se estropee. En este artículo, te aconsejaremos sobre cómo sacar un anillo del robot aspirador.
El robot aspirador se ha tragado mi anillo: ¿qué hago?
¡Que no cunda el pánico! Lo primero de todo es convencernos de que, aunque a veces parezca lo contrario, el robot aspirador no es un ser vivo, no va a «digerir» nuestro anillo, así que podremos recuperarlo sin problemas. A continuación, enumeramos unos sencillos pasos que podemos seguir:
- Empezaremos desconectando el robot aspirador, para que se detenga y podamos actuar con mayor facilidad.
- Seguidamente, le dareos la vuelta al robot aspirador, e inspeccionaremos los diferentes rodillos y cepillos que tiene en la parte inferior. Con suerte, el anillo habrá quedado enrado en alguna de esas piezas, y podremos cogerlo fácilmente.
- Si no es así, y el robot aspirador se ha «tragado» el anillo, lo que debemos hacer es desconectar (en caso de que sea posible) la batería del dispositivo. Y es que tendremos que abrirlo para ver si podemos encontrar el anillo en el interior del robot.
- Primero, fijaremos nuestra atención en el depósito para la suciedad del robot. Si el anillo es pequeño, lo más probable es que haya sido aspirado sin dificultad y que haya ido a parar ahí, junto con el polvo y las pelusas del suelo. Si es así, perfecto, ya es nuestro.
- Si no estuviera ni en los cepillos y rodillos ni en el depósito de la suciedad, la cosa se complica bastante, pues todo indica que se ha quedado atascado en algún lugar del interior del robot. Con ayuda de algún destornillador largo y fino, podemos tratar de encontrar algo en las diferentes bocas o entradas de suciedad del aparato.
- Si tampoco está ahí, no quedará más remedio que empezar a desmontar el robot aspirador, para tratar de tener acceso al punto en el que nuestro preciado anillo ha quedado atascado. Eso sí, con mucho cuidado de no romper nada y de no perder ningún tornillo o pieza que quitemos, para volver a ensamblarlo todo después.
- Si después de todos esos pasos, no hemos dado con la ubicación de nuestro anillo, no quedará más remedio que contactar con el servicio técnico para que procedan ellos con la «operación de extracción».
Esperamos que, con estos consejos sobre cómo recuperar un anillo del interior del robot aspirador hayas podido tener éxito. Si es así, déjanos darte un último consejo adicional: ¡hazte con un buen joyero para no extraviar tus joyas! 😉